Dice que sabe de demonios, de noches infinitas, de abismos que nunca cesan, de huecos que nunca cierran, de habitaciones diminutas, de corazones ajironados, de remiendos, de mundos donde no existe la orfandad, de submarinos y de aviones, de pentagramas silvestres, de claves de luna, de exorcizar intrigas, de lamer heridas, del plumaje de mis tobillos, del reverso de mi piel.
Dice que sabe de lágrimas, de las pequeñas, las intensas, las inmensas, de las mías. Qué sabe de vuelos sin escalas, de momentos fermentados con miradas, del olor a tierra mojada, a hierba sesgada, del sol sostenido, de suspiros remendados, de la costura de mis labios.
Dice que sabe del fotograma que la vida le ha hecho a mi pecho, del ritmo de mis latidos, del tamaño de mis miedos y de esos que sin pertenecerme hago míos.
Me repito que no son maneras, ni son horas, que es mal momento, que no lo conozco, y además no es mi tipo. Pero...
Él es hora exacta, momento ideal, el de siempre, él no es por mi... sino conmigo.
Y yo soy toda, siempre, entera, yo.
A.
Es ideal para ti.
ResponderEliminarEl hombre de tu vida.
Besos.
No lo sé, Toro.
EliminarPero por el momento, él es todo lo que siento.
Besos para ti.
No pues así sí...."Lo que se han de comer los gusanos, qué lo disfruten los humanos", como bien dijiste! =)))
ResponderEliminarTodo tuyo.
Besos Ale =))))
Jajaja, considerada que es uno.
EliminarBesos Lili.
:)
Todos sabemos de demonios, de noches, de lágrimas y de cosas hechas jirones. Lo que pasa es que a unos les sienta mejor que a otros vivir las experiencias que te llevan a conocer esas sensaciones, esos sentimientos.
ResponderEliminarDefinitivamente tú eres de las que sabe moverse, de las que aprendió a expresarlas. Y por suerte ahí estamos tus lectores para poder disfrutarlas... a mí se me da fatal hablar de los fantasmas que guardo en el armario, lo que se me da realmente bien es dejarlos ahí atrapados.
Pero qué dices, Holden.
EliminarLa afortunada aquí soy yo que tengo el placer de que me lean y comenten.
Cuando puedas me dices como se hace, vale?
Besos, zorro.
Hay personas que logran que te sientas en paz. Que logran que los demonios sean más mansos, quizás los suyos ya los domesticaron...no sé. O quizás llevan mejor las penas ajenas, las que mejor comprenden.
ResponderEliminarSi es así, vale la pena tenerle/los al lado.
Un beso linda
Y si nos tocan el alma, ya es un poderoso motivo,,Maman.
EliminarBesos, hermosa!
por lo leído, ideal
ResponderEliminarbesos
Por el momento, si.
EliminarBesos y gracias, Óscar
Él, con su inmenso rosario de “Dice que”. Ella, con su simple “Yo soy toda, siempre entera, yo”.
ResponderEliminarÉl, (por consecuencia) lleva una vida intensa y sabe tener siempre a la mano una ruta de escape, pues en cada “dice que” no hay otra cosa que una puerta abierta. Mientras tanto, ella porta sus sueños por equipaje y su corazón la llena de coraje para perseguir sus latidos. No tiene más norte que sus sentimientos, la honestidad es su bandera, se sabe integra, entera, plena y cuando se enamora pone la vida en ello.
Resumiendo, el final de esta historia queda abierto.
Te dejo mis mejores deseos por posdata, que tú eres una bendición de mujer para todo aquel que se precie de ser un hombre, y espero que él también lo sea para ti.
Ay Juan Carlos, tú me desarmas cualquier mecanismo de defensa.
EliminarEs usted muy amable.
Y gracias por tanto.
Beso.
Llámalo como quieras, pero necesito sentirte mía.
ResponderEliminarUy, metáfora ilegible.
EliminarGracias por leer.
Pues..estupendo...un saludo desde Murcia....
ResponderEliminarParece alp.
EliminarGracias y saludos igual para ti.
Es muy lindo tu escrito.
ResponderEliminarUn abrazo, A.
🍃
Gracias Iván.
EliminarWOW.... Tendrá que repartir su cuerpito en muchos relicarios.
ResponderEliminarNo lo suelte signorina ahora que controla y domina todo el territorio de su cuerpo,
Disfrutelo seguro lo merece.
Elegimos nuestros caminos.
No se que decir más, ando espeso
Jaja, qué parte quiere Sicilia. Le doy a escoger, sólo que no se aceptan devoluciones,eh.
EliminarNo diga nada, yo puedo leer su mente.
:)
Oh, tienes un gran portento que por nada hay que desaprovechar.
ResponderEliminarMil besitos de anís, preciosa.
Jajaja, mis manos son pequeñas, pero veré que logro agarrar.
EliminarPreciosa, tú.
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ResponderEliminarSomos afortunadas ;-)
ResponderEliminarBesazos
Mucho mi querida María!
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