Aviso





 Tú, yo, nosotros.

Hoy al fin somos otros.

Ya no te esperaré en el quicio de la puerta.
Ni te veré a través de la ventana.

Para sobrevivir hoy tendré que inventarte.
Dibujaré para ti boca, pechos y faldas.

Navegarás por mi espalda y será tu feliz naufragio
donde tiemblen tus ganas.

Hoy te perderás en el vértice de mis muslos.
Mi boca será donde aterrices.

Hoy mi ombligo será tu precipicio.
No dejaré reparo en voluntades.

Hoy, por fin, encontrarás esa guarida.
Y mi piel será donde te exilies.

A.


Esquirlas






Ignorar el eco de la ciudad a cuestas. Reconstruir esa sonrisa que perdimos al nacer. Tirar a la basura todos los zapatos, recuperar nuestros pies. Cerrar ventanas. Morir sin tapujos. Encerrar la nostalgia en el armario. Querer.
Querer hacerlo. Pasar saliva. Olvidar el reloj. Y calibrar la balanza a media noche, después del último café.

Asusta.


Ese pesar de la espera, y en las manos las señales púrpura de todos los orificios del cuerpo y del alma.


Regocijo.


De placer y de derrota. Como las sombras que no se ven en los días nublados. Como esas marcas de ausencia, que digan lo que digan... no se marchan.


Y usaremos mientras tanto, los unos a los otros. Para llenar de piel esos vacíos ancestrales que llevamos desde que nos par(t)ieron. 


Esto es la vida.


Te juro que un día quise probarme otra piel que me apretara menos. Pero siempre elegí esta camisa de fuerza que me ata a la espiral de la insensatez, al aliento de lo efímero y a lo más vulgar de la inconsciencia.

Con la boca llena de lenguaje herido, vomitando cada herida concebida y con una felicidad intacta en la punta de mis dedos. Esperar por esperar, sin importar el qué, sino el cómo. Mancillando páginas en blanco con el delirio de lo absurdo.

¿No vas a creer lo que te digo?


Tal vez lo tenga merecido. Por suerte ya la vida no me pide referencias. Me he quedado sola y el camino ya no es igual.


No hay palabras que me acompañen, sólo el seco respirar del aire en el que ya no estás.


Amores, desamores. Presencias y faltas. Risas y lamentos.

Héroes contra villanos. Tierras extrañas, sin noches, sin versos, sin aguas.

Así es mi partida. Así hago el camino. 


Y así, la llegada.


A.





Desvelo







Viví una historia,
efímero cuento,
como agua de río,
fluyendo, corriendo.

Cascadas de anhelos,
trenzaron tu pelo,
adornado de lunas, 
de peces, de lirios 

Un sueño utópico,
escenario de ninfa,
quimera de musa.

Gallos y grillos,
cantan la noche,
te gritan a eco, que
...amarme es locura

Todo llega
hoy solo tengo heridas
las heridas que yo escojo tener abiertas.


A.